“A los 14 años empecé a trabajar en un hotel, donde me volví Chef profesional.
Tenía muchos problemas económicos, no había diálogo con mi esposa. Ella sufría de depresión, tomaba pastillas, llegó al punto que sólo iba a la casa a dormir, ella me dijo, que me abandonaba, que se regresaba a Ecuador con su familia porque no aguantaba más.
Ella comenzó a asistir a la Iglesia Universal, y empezó a cambiar, al ver su cambio también fui a la Universal y mi vida también fué transformada.” – dice.
Fredy escuchó hablar sobre la Campaña de Israel. “Sabía que podía conquistar cosas grandes, así que tuve la oportunidad de participar en la Campaña de Israel y sin pensarlo dos veces sacrifiqué; Así conquisté mi propio restaurante, en la ciudad de Cuenca; mi matrimonio hoy en día es estable y el negocio va prosperando”
¡Gracias a Dios tengo una vida prospera! Fredy Ramirez
