Las personas que hoy participan de las reuniones ministradas por el pastor Alexandre Barreto, no se imaginan que, en el pasado, el ex productor musical y frecuentador de bailes funk vivía una vida promiscua, llena de vicios, peleas y sufrimiento.
Ganador de innumerables premios de funk, el carioca cuenta que su mayor sueño era grabar con un gran equipo de sonido, un grupo ícono de funk en esa época. A él le gustaba ir a los bailes para provocar disturbios y agredir a las personas. Además de eso, consumía drogas y traicionaba a la novia – hoy, su esposa. A pesar de vivir rodeado de amigos y en muchas fiestas, había un vacío muy grande en su interior.
"Pensaba que si hacía un gran show y cantaba para muchas personas, iba a llenar el vacío que estaba dentro mío" – explica.
No obstante, nada lo llenó, ni las drogas, ni las mujeres, ni la conquista del contrato tan soñado, nada pudo hacerlo feliz. "En el momento en que bajé del escenario, percibí que el vacío todavía estaba dentro mío", relata Alexandre.
Alexandre recién cayó en sí cuando un grupo armado intentó ejecutarlo, y se vio entre la vida y la muerte. Recuerda que lo encerraron en un cuarto apartado, juntamente con sus amigos, los golpearon mucho y solo no los mataron debido al número de testigos que había del lado de afuera, personas que él mismo había llevado al baile, pues era líder de un barrio de la región.
Para agravar aún más su sufrimiento, debido a toda la situación, se terminó su relación amorosa. Alexandre, sin tener una dirección a seguir y con ese vacío enorme en el pecho, estaba en el fondo del pozo.
Sin embargo, por medio de una invitación de un amigo de la Fuerza Joven y, también, debido a muchas oraciones y cadenas realizadas por su suegra en la Iglesia Universal, decidió cambiar de vida, entregándola por completo a Dios. Obtuvo una familia que no había encontrado en ningún otro lugar.
Hoy, responsable de la Universal del estado de Mato Grosso do Sul, casado con Lilia Marques hace trece años, líder de muchos pastores y obreros, Tiene su vida transformada.
Él, que en el pasado llevaba a millares de personas a bailes, vicios y destrucción, hoy tiene como satisfacción conducir a millares de personas al Reino de Dios.
Alexandre