Usted dice que quiere servir a Dios, dice que quiere vivir para Él y servirle todos los días de su vida… pero, en la práctica, ¿realmente usted quiere decir eso? Si usted le sirve solamente en su tiempo libre y vive la mayor parte del tiempo para sí misma, la respuesta es no, usted no Lo sirve.
Usted sólo sirve a una causa cuando usted cree en ella, de verdad, que ella es mayor que usted misma. Cuando usted percibe que ella ya existía antes y continuará existiendo después de usted. Cuando usted sabe que su vida no es nada comparada a ella. Usted no se avergüenza o se limita en hacer más que su mejor y TODO lo que usted hace está enfocado en favor de esa causa.
Si la Obra de Dios no le consume, usted todavía no está sirviendo a Dios.
Usted sirve a aquello que le consume.