Que todo el mundo tiene problemas, ya lo sabe todo el mundo. Sin embargo, no son todos los que entienden que existen problemas que atraen a otros problemas y normalmente ellos suceden adentro de nosotros. Es el caso de la ansiedad.
En la ansiedad, las personas toman decisiones equivocadas e incluso pueden hacer un papelón. Si hay alguien que cometió errores en la historia, nadie recuerda los errores, sino el lío que hizo al querer resolver el problema de la primera manera que le surgió en su mente.
La ansiedad es perjudicial para su espíritu, ¡permanezca atenta!
Aquí van algunos pasos que le pueden ayudar a lidiar con ella.
Primer paso: entienda que ese sentimiento les surge a todos y nadie está por encima de ella todo el tiempo. Usted tiene que lidiar con ella cada vez que aparece. Sería óptimo superarla hoy y nunca más tener que lidiar con ella, pero no funciona así. Por eso, esté atenta a los síntomas.
Segundo paso: la ansiedad es un miedo y para vencer el miedo, usted precisa enfrentarlo de frente. Digamos que el pensamiento de que nunca va a encontrar a una persona que sea ideal para usted llega a su cabeza, ¿cómo luchar cara ac cara con ese pensamiento? Si yo no lo encuentro, él me va a encontrar. Dude de sus dudas, cuestione sus miedos – todo el tiempo.
Tercer paso: evite situaciones que promuevan la ansiedad dentro suyo. Si después de ver películas románticas o escuchar canciones de amor, usted se queda deprimida; evitelos. Si tener determinadas amistades, sean personal o virtualmente, la hace sentir atrapada o ansiosa por una determinada persona, haga algo diferente.
Cuarto paso: lo opuesto a la ansiedad es la calma, paciencia, descanso y confianza. Invierta en eso. En lugar de quedarse triste el sábado a la noche, ¿qué tal tomar un baño de inmersión, hacerse un tratamiento para la piel, arreglarse las uñas e ir a descansar más temprano?
Quinto paso: una buena relación con Dios le proporciona mansedumbre. Vea simplemente lo que el Espíritu Santo nos da gratuitamente:
“Más el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza”…(Gálatas 5:22-23)
Yo me pregunto: ¿qué es lo que usted tiene en la cabeza para no buscar esa Maravilla Divina?
P.D: A partir de este jueves, le estaremos ungiendo con la esencia de Nardo, que significa “desprendimiento”, en la Terapia del Amor. Mientras que no se desprenda de las cosas que le hacen mal, no podrá tener una vida amorosa saludable.