«Desde mi adolescencia intenté tener varias relaciones, pero nunca pude encontrar estabilidad sentimental con nadie. De una u otra manera, las personas se iban de mi vida.
Tiempo después, conocí a alguien que decía quererme, que buscaba tener un futuro conmigo, y me hizo un sinfín de promesas. Aquella relación solo duró 6 meses, él se fue abruptamente dejándome embarazada. Esto fue muy doloroso para mí, me cuestionaba por qué estaba pasando por todos esos problemas.
Después de este gran fracaso, no dejaba de pasar por mi mente que siempre estaría sola y que nunca iba a ser feliz con alguien, mucho menos ahora que tenía a mi hija. A causa de eso sufrí por la depresión. Me decían que le echara ganas por mi hija, pero simplemente no podía. Solo me preguntaba: “¿Por qué no mejor me pasa algo y me muero?”.
Llegué a la Universal con la idea de ya no conocer a nadie. Sin embargo, en cada reunión aprendí que necesitaba soltar todo aquel daño para que Dios obrara en mí y, así, pudiera ser feliz. Era una elección que solo yo podía tomar.
Al hacerlo, logré librarme del enojo, la tristeza y los conflictos que había en mi cabeza. La presencia del Espíritu de Dios en mi vida fue lo que me dio la verdadera felicidad. Cuando estuve bien internamente, me di la oportunidad de conocer a quien ahora es mi esposo. A diferencia de lo que viví en el pasado, en mi matrimonio tenemos una comunicación única porque Él es la base de nuestro hogar.» -Lorena Chanez Medina
Terapia del Amor
Todos los jueves a las 7 p. m. se lleva a cabo esta reunión dedicada a cuidar a la familia, la vida sentimental y el interior al sanar el corazón de las inseguridades y vivencias del pasado. Te esperamos en Av. de las americas #305 al norte de guayaquil. O en la Iglesia Universal más cercana.