En hebreo, la lengua en la que la Biblia fue escrita, la palabra Coreshbet quiere decir “acercarse” o “llamar la atención”. Coreshbet es la raíz de la palabra designada para sacrificios, que es Corbanot, que en singular es Corban (קָרְבָּן), y que en la Biblia quiere decir todo tipo de sacrificio de animal que era ofrecido a Dios por diversas razones, el cual podría ser toro, oveja, macho cabrío o paloma.
La raíz de la palabra Corbanot viene entonces de “llamar la atención”. Imagínese, Corban es sacrificio y la raíz de la palabra es llamar la atención. Por lo tanto, nos acercamos a Dios y llamamos Su atención cuando sacrificamos.
¿Y dónde presentamos el sacrificio? En el Altar. La palabra altar (מִזבֵּחַ), en hebreo, significa lugar de matanza o lugar de sacrificio. Cada vez que un Altar dedicado a Dios era levantado, Él tenía que descender para aceptar el sacrificio.
Un altar era levantado solamente en situaciones especiales.
1 – Cuando Dios lo ordenaba
2 – Cuando una situación exigía sacrificar. Eso obligaba a que Dios Se manifestara en ese Altar.
Otro tipo de Altar es aquel que no es levantado, sino que es un Altar natural, como el Monte Sinaí.
El Monte Sinaí fue considerado por Dios como un Altar porque Él descendió allí. Si Él descendió, ese lugar fue consagrado y, entonces, pasó a ser un Altar. Dios Se manifiesta en el Altar cuando los sacrificios son presentados.
Vea que el otro altar natural que Dios consagra a Él es la vida de alguien, cuando Él desciende, en la persona del Espíritu Santo.
Mi amigo, mi amiga, llame la atención de Dios por el sacrificio, para que así Él descienda en su vida.