¿Usted sabia que hay personas olvidadas por Dios? ¿Usted sabia que hay obreros olvidadas por Dios? ¿Usted se acuerda que cuando llegó a la iglesia, en las primeras semanas, en los primeros meses los milagros sucedían, usted hacía un clamor y Dios le contestaba, usted hacía un voto en el altar y la respuesta era inmediata? ¿Sabe porqué las respuestas ahora no vienen por más que usted ayune o por más que usted asista a la iglesia de domingo a domingo? ¿Sabe porqué?. Porque usted ha sido olvidado por Dios.
Usted debe hacerse presente a Dios por medio de la lucha y la perseverancia, no aceptar más la situación por la que está pasando. Pero esta lucha solo la hace quien está cansado de sí mismo, cansado de la vida que lleva. Y debido a esa determinación, pone toda su fuerza en la lucha y sacrifica.
Fue eso lo que Jacob hizo cuando luchó con Dios en el Vado de Jaboc:
“Y el varón le dijo: No se dirá más tu nombre Jacob, sino Israel; porque has luchado con Dios y con los hombres, y has vencido.” Génesis 32:28
Luchar con los hombres significa luchar consigo mismo, pues él no quería ser más el que era. Luchar con Dios, en otras palabras quiere decir: “Dios, Tú tienes que bendecirme a causa del sacrificio que hice.”