El ser humano, a lo largo de toda su vida, ha transitado por muchos caminos, que siempre lo han llevado a un mismo lugar, a la casa del dolor, el sufrimiento y la desesperación.
Pero aunque grande sea el sufrimiento, siempre se vuelve a arriesgar a empezar, lo que la persona no sabe es que no importa cuántas caminatas realice, si sigue yendo por el mismo camino, siempre va a llegar al mismo lugar, es momento de darle la espalda a ese camino y escoger ir en otra dirección, quiere decir en sentido contrario al que estaba siguiendo, y así conseguir la victoria.
El CAMINO SANTO, es la oportunidad que la persona tiene para poder cambiar de vida, si la persona creyere y aceptara la ayuda que viene de Lo Alto, su vida sería completamente diferente.
Dios quiere que usted tenga una vida llena de éxito, de salud y que exista la verdadera felicidad, pero sólo la va a poder conseguir si usted permite que, el Todopoderoso sea el dueño de su vida.
Dios dice: “…Será llamado CAMINO DE SANTIDAD; no pasará inmundo por él…” El camino Santo donde Dios habita, y donde Dios está no está el mal, es por esto que también dice “…el inmundo no pasará…” lo inmundo no es suciedad física, sino todas las cosas que a usted lo han hecho sufrir hasta ahora, como los vicios, las enfermedades, los problemas familiares, fracasos, miedos, inseguridades, problemas que han terminado con su paz y que sólo lo llevan a sumergirse en un profundo dolor.
Si usted quiere aprender a resolver, completamente, sus problemas, venga este sábado a la reunión de los Casos Imposibles y pase por este CAMINO SANTO, en donde, por la fe, Dios tomará cuenta de su vida como Juez Justo y le dará la solución favorable para su vida.
“… será llamado CAMINO DE SANTIDAD; no pasará inmundo por él…” Isaías 35:8
Era imposible ser curada
“Desde hace dos meses me había estado sintiendo muy mal, tenía dolores en el seno izquierdo y me aparecieron unas “bolitas” palpables en el mismo; estaba preocupada ya que desconocía el por qué de esto.
No podía permitir que esta dolencia continuara, así que decidí participar en el Ayuno de los Casos Imposibles, tocar el Manto y pedir a Dios por mi cura, usando la fe, Él no tardó en responder.
Hoy estoy curada, ya no siento ningún tipo de malestar y las protuberancias desaparecieron. Mi imposible se hizo posible, doy fe de eso”, finaliza Blanca.
Anímese a participar en el Ayuno de los Casos Imposibles, este sábado a las 7H, en la Av. de Las Américas 305, norte de Guayaquil, también puede participar a las 10H y 18H30.