Resultados del tratamiento del agua Bendita
Los fuertes dolores de cabeza me hacían gritar toda la noche. Tomaba medicamentos, pero no mejoraba. Mis familiares al verme en ese estado se desesperaban. Las pastillas que tomaba me provocaron úlcera. También padecí de artritis y con un tumor en el cuello. No dormía. Estuve 30 años así.
Una madrugada vi el programa de la Iglesia Universal, fui a participar y tomando el Agua Bendita pasé a creer en el milagro; poco tiempo después sucedió, fui curada totalmente. Hoy gracias a Dios no dependo de ningún medicamento y además soy feliz, tengo paz y alegría.