¿El Problema es la semilla o el lugar en dónde cae la semilla?
Al iniciar la reunión el pastor Walber Barboza dio una palabra e hizo una oración por la vida sentimental de los presentes, y por la Sagrada Familia; explicó los beneficios de participar en el Ayuno de Jesús, justo en los tiempos de la copa del mundo, dando prevalencia al sacrificio, como prueba de fe, “yo soy el sembrador, la persona que comparte el evangelio con los demás y les reparto la semilla que es el mensaje de Dios para nosotros, pero ustedes deciden arar la tierra, abonarla y prepararla para luego cosechar grandes frutos” explicó, Jesús usó la parábola del sembrador para explicar las diferentes formas en como una persona recibe el mensaje de la palabra de Dios.
“El sembrador salió a sembrar. Y mientras sembraba, parte de la semilla cayó junto al camino; y vinieron las aves y la comieron. Parte cayó en pedregales, donde no había mucha tierra; y brotó pronto, porque no tenía profundidad de tierra; pero salido el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó. Y parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la ahogaron. Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno.” San Mateo. 13:4-8
Los que están junto al camino son los que oyen pero no practican; las semillas sobre las piedras son los que creen por algún tiempo, pero se apartan cuando llega la prueba; las semillas entre espinos son los que oyen, pero con el correr del tiempo, los ahogan las preocupaciones, las riquezas y los placeres de esta vida, y no maduran; las semillas en buena tierra son los que oyen la palabra con corazón noble y bueno, la retienen y como perseveran, producen una buena cosecha.
En este tiempo del Ayuno de Jesús cada uno de nosotros seremos los encargados de arar nuestra tierra, abonarla, sacarle raíces muertas, regarla y finalmente cosechar los frutos añorados, esto será únicamente lo que necesitamos para fortalecer nuestra relación con Dios, y superar todos nuestros problemas, dejándolos en el olvido, para de esta manera obtener una vida nueva, llena de paz, felicidad, y armonía.