Tal vez todos están de acuerdo con que los días están pasando mucho más rápido que hace unas décadas.
Siendo eso comprobado científicamente o no, el hecho es que antes lográbamos hacer más cosas en 24 horas incluso dormir bien que lo que hacemos actualmente.
Pero ¿por qué pasa esto si continuamos teniendo las mismas 24 horas como siempre?
La respuesta está en el consejo de Pablo para los cristianos de Éfeso: “Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos”. (Efesios 5:15-16)
La vida moderna trajo consigo muchas facilidades, comodidades, entretenimiento y distracciones, especialmente, por medio de la tecnología que está a disposición de casi todos.
Las redes sociales, los portales de noticias, los juegos en línea, la televisión, etc., se han robado nuestro tiempo, que cada vez se vuelve más valioso. Por eso la importancia y la necesidad de observar en dónde lo hemos gastado, ya que una vez perdido, no nos será posible recuperarlo.
Tal vez, este es el motivo por el cual su relación pende de un hilo. Ha gastado su tiempo en cosas innecesarias y no le ha dado la debida atención a su cónyuge y, por eso, ustedes están cada vez más distantes. Priorice lo que de verdad es importante para usted. ¿Cuáles han sido sus prioridades diarias? ¿Despierta y corre de un lado a otro, haciendo mil cosas y cuando se da cuenta el día terminó?
Si eso ha sucedido, probablemente, darle atención a su pareja es la última cosa en la que piensa a lo largo del día, ¿no es así?
Entonces, si se detiene para reflexionar, con seguridad, llegará a la conclusión de que, realmente, no ha puesto a su cónyuge como prioridad, que es el lugar que él/ella debería ocupar en tu vida.
¿Qué tal empezar a prestarle más atención y priorizar lo que es y, principalmente, a QUIEN es más importante para usted? ¿Quiere saber cómo? Entonces, participe este jueves en la Terapia del Amor.
En esta reunión, aprenderá a establecer sus verdaderas prioridades y a administrar bien su tiempo, para que, de esa manera, pueda valorar lo más valioso que tiene y no puede seguir des cuidándolo, es decir: su relación.
“Estuve a punto de divorciame por causa de la infidelidad de mi esposo”
Mi esposo comenzó a usar drogas y alcoholizarse, hacía cosas ilícitas que lo llevaban a estar constantemente en la cárcel. Uno de los momentos más amargos de mi vida, fue enterarme de la infidelidad de mi esposo.
Esto me llevó a caer en una profunda depresión y a un estado de nerviosismo. Fueron muchos años de estar viviendo en esa situación, por lo que llegué a pensar seriamente en el divorcio, ya que todo parecía estar perdido.
En medio de esta situación, mi hermana me invitó a la Iglesia Universal. Acepté participar, me sentí muy bien y continué perseverando. El cambio en mi vida no fue de un día para el otro.
Lo primero que Dios hizo en mi vida, fue liberarme de toda la opresión que venía cargando, después, mi matrimonio fue restaurado y mi esposo salió de los vicios. Hoy existe la fidelidad y felicidad en mi hogar.
Participe este jueves especialmente a las 19h o en los diversos horarios 7h, 10h, 15h en el templo de la fe ubicado en Av. de Las Américas 305, al norte de Guayaquil o en la Iglesia Universal más cercana a usted.