¿Todos podemos entrar a la presencia de Dios? ¿CÓMO PODEMOS HACERLO CON NUESTROS HIJOS?
Muchas madres no saben cómo llevar a sus hijos a la presencia de Dios, pero olvidan que ellas son espejos para sus hijos, y que ellos se ven reflejados en las actitudes de sus madres, y quieren ser como ellas a toda costa. Sin embargo cuando su hijo no quiere mirar su ejemplo hay muchas maneras de mostrarle su fe inteligente y para lograr esto debe controlar su carácter, no irritarse jamás, obligar a los hijos nunca es la solución, más bien que ellos vean el testimonio vivo de sus vidas transformadas y el sacrificio que ellas hacen por unir a la familia habla más que mil palabras.
El pasado domingo 27 se realizó una reunión de Madres en Oración que abarcó esos temas y mucho más, se orientó a las madres lo que deben hacer cuando sus hijos se encuentran en vicios y cómo rescatar sus vidas al sendero correcto.
Se dice que cuando se prueban las drogas por primera vez es por curiosidad, y se tiene mucha razón en esto, pero lo que las madres no saben es que esa curiosidad o ese primer paso mejor dicho, es por falta de identidad propia, y ese es el trabajo de nuestras madres, formar el carácter del hijo y pulir su personalidad, mostrándoles el valor que tienen y explicándoles desde pequeños lo que ocurre en el mundo, advertirle los peligros y lo más importante enseñarles el camino de Dios.