Salomón pide sabiduría. Ese es el título del primer capítulo de Crónicas, y dice así:
“Salomón, hijo de David, fue esforzado en su reino; y el Señor, su Dios, era con él, y lo engrandeció en sobremanera”.
Aquí vemos el secreto de Salomón. Él era un hombre cuya vida estaba entregada a Dios y todo lodemás ya debes conocer un poco de la historia de este gran hombre. En caso de que aún no la conozcas y te interese, lee los libros de Reyes. Sin embargo, ¡está escrito que él era un hombre esforzado! ¿Qué sería ser una persona esforzada? ¿Será malo? Porque a veces se entiende eso,¿no? Probablemente, ya hayas escuchado algo como:”;Ah, no es que ella sea tan inteligente… pero por lo menos es muy esforzada”;. ¿Y cuál es el problema de ser muy esforzada? Muchos ven eso como un premio consuelo, como si Dios, mientras la estaba creando hubiese pensado: “;¡Angel! ¿A quién formaré ahora? Ah… ¿Es María? No, no, no… ¡Ella no será demasiado inteligente! Pero para no dejarla a merced de la ignorancia, ¡voy a hacerla una mujer esforzada! ¡Listo! Próximo!!!”; ¡No!
Ser esforzada es una virtud que pocas tienen, ¡muy pocas, en realidad! Y aveces, la que la tienen se dejan convencer de forma errónea que eso no es ni nuca será un atributo positivo. Por lo contrario, encaran esa cualidad como un fardo, ¡no la usan para su propio beneficio!Ser esforzado es luchar y esforzarte al máximo por alguien o algo. Es emplear toda tu diligencia para lograr algo. Es REALMENTE hacer lo que debe ser hecho. Sin fingir, actuar, decir que estudió cuando en realidad solo estuviste en el mecanismo de dar vueltas.
¿A quién quieres engañar? Porque quien va a quedarse más tiempo estudiando eres tú, ¡nadie más! Las cosas no dependen solo de Dios, tenemos que esforzarnos, tenemos que hacer nuestra parte! Sé bien que muchas veces el desanimo es mayor, ¡y la desesperación también! Los pensamientos de derrota vienen casi las 24 horas por día y entras en una guerra mental intentando combatirlos. Sé que muchas veces (realmente muchas veces!) tu cama mira con tanto cariño que es prácticamente imposible resistir a su llamado, lo sé! Pero muchas veces tienes que ser más fuerte que la cama, que la televisión, facebook, Instagram. ¡Tienes que ser más fuerte que tus ganas, tienes que esforzarte!
¡Vamos a esforzarnos, y Dios te honrará!
Tenemos un gran ejemplo: Salomón! Si somos el 10% delo que él fue, ya seremos mucho más de lo que un día imaginamos ser Y así seremos las mejores estudiantes, empresarias, profesionales que existen! Así como no hay y nunca habrá alguien tan rico como Salomón, lo mismo sucederá con nosotras! Cree en esto y esfuérzate!
Sé una #EstudianteBlindada y Esforzada. Si Salomón fuese un hombre perezoso, sin iniciativas, ánimo, dudo que Dios hubiera atendido a su pedido. Recuerda: no dependas de lo que sientes para hacer las cosas correctas, ¡simplemente ve y hazlo.
Nos vemos por aquí o por allí.