Nuestro matrimonio estaba pasando por momentos difíciles a causa de la ausencia de mi esposo, pues él trabajaba mucho y no me daba atención.
El trabajo consumía casi todo su tiempo y de esa manera él se estaba alejando de mí, viajaba constantemente fuera de la ciudad. En ocasiones, se iba por varias semanas y sólo conseguía verlo una vez al mes.
La situación empezó a cambiar a partir del momento que nos invitaron a participar en una reunión de la Iglesia Universal. Aquellas reuniones nos propiciaron una visión diferente al respecto de nuestra vida como pareja y en todos los aspectos.
Cuando escuchamos hablar de la Campaña de Israel vimos la oportunidad de cambiar de vida por completo. Después de presentar a Dios nuestras vidas por entero a través del sacrificio mi esposo se volvió un emprendedor. Así fue como surgió la idea de abrir un negocio especializado en el lavado de autos.
Los productos que usamos son de tipo Eco Friendly, los cuales cuidan nuestro medio ambiente y también protege el brillo de los carros haciéndolos lucir como nuevos. También, ofrecemos el servicio de dar brillo a las llantas, usamos líquidos especializados para quitar las manchas de la parte interna del vehículo. Nuestro trabajo está garantizado, queremos que el cliente quedé satisfecho.
Hoy podemos decir que la fe que aprendimos a usar en la Palabra de Dios es la que nos dio la oportunidad de crecer no sólo económicamente sino mucho más en nuestra vida espiritual, que es lo que nos sustenta a diario y por la que creemos que la Campaña de Israel es la oportunidad de alcanzar aquello que queremos de una forma más rápida y eficiente.
Hoy, gracias a Dios tenemos nuestra propia casa, autos y nos podemos dar los lujos que antes no lográbamos, incluso, pasar más tiempo juntos. Perseverando en la fe hemos obtenido una nueva vida, desde que hicimos una Prueba con Dios.
“Sin Dios de nuestro lado jamás hubiesemos podido vencer los problemas que enfrentabamos, sólo Él nos dio la dirección correcta de lo que debíamos hacer.”
Sr. Victor y Jackeline