Cuando Dios creó el mundo y todo lo que en él hay, Él se esforzó en hacerlo todo perfecto para por último, al crear el hombre y la mujer, ellos vinieran a ver lo especiales que ellos son para Él. Así como la madre prepara la habitación de su primer bebé, para que al nacer, venga a vivir en una habitación de acuerdo al amor que profieren hacia él, decorado de forma apropiado para que se sienta el bebé más feliz del mundo.
Sin embargo, con el tiempo, Adán y Eva dejaron de apreciar todo aquello e inmediatamente quisieron vivir sus vidas independientes de Dios. Le desobedecieron y, no tuvieron más estructura para vivir en el Jardín del Eden. Y desde entonces, esta tierra ha sido maltratada y abusada por el hombre. Y aquel hogar dulce hogar que Dios había creado se hizo un lugar que está camino del fin.
¿Y no es eso también lo que acontece con muchos hogares? Las personas están tan ocupadas con tantas cosas que el hogar que un día era su lugar en este mundo se convirtió en una verdadera basura. Muchas mujeres hoy se empeñan en nunca fregar, ya que estudiaron, tiene sus carreras, trabajan, y creen que el trabajo doméstico es para quien no tiene nada que hacer.
Ropas sucias por toda la casa, el sofá oliendo mal, cuarto de baño que no ve un desinfectante desde hace días, toallas que ya ni secan más de tan usadas que están, azulejo lleno de grasa, fregadero hasta arriba de platos, cajones y armarios desordenados, nevera sucia y hecha un desastre, sabanas sucias, en fin…y ahí quien vive en esa casa normalmente se justifica diciendo que no es ninguna empleada para estar cuidando de la casa o que su madre nunca le enseñó a cuidar de una casa.
Ah si ella supiera lo cuánto esa casa (o habitación) habla de ella… sucia, perezosa, desorganizada, relajada, y sin noción… Así como la destrucción de la naturaleza ha hablado del ser humano.
La Tarea como Ofrenda 8 es usted cambiar la situación de su hogar.
Si ya es una persona cuidadosa con su casa, va a averiguar que más puede hacer para que ella la represente bien… ponga unas plantas, la distribución de los muebles, colgar unos cuadros, cambiar las lámparas…Y si usted no ha sido cuidadosa con su hogar (o habitación), entonces destine este próximo fin de semana en hacer una limpieza general en él… comenzando por su habitación.
cuando ya este todo limpio y arreglado, saque fotografías y péguelas en su diario para recordar esos momentos de como queda después de estar todo arreglado… si usted es cómo yo, va a volver a mirarla de nuevo, suspirar profundamente y alegrarse de tener un lugar tan placentero de vivir.
Quede para intercambiar fotos con su amiga como hermana y así compartir la experiencia de cómo fue el hecho de cuidar de su hogar. Usted va a ver lo bueno que es aquello que otros dicen ser tan degradante.
En la fe y en el Escondrijo del Altísimo.