No podía caminar por los fuertes dolores que sentía
Durante meses estuve sufriendo de fuertes dolores en los hombros y piernas, que no se me pasaban ni con analgésicos.
A pesar de eso, nunca desistí de mi fe y oraba pidiendo a Dios la cura. Pero, los dolores eran tan fuertes que a pesar de querer venir a la Iglesia no podía hacerlo, porque el simple hecho de subirme al taxi se me hacía imposible, ni imaginarme un bus. No soporté más seguir en esa situación, ya que estaba segura que Dios podía ayudarme.
Vine a participar de la reunión de los Casos Imposibles y pasé por el Valle de Sal, después de eso no he vuelto a sentir dolores, ahora puedo caminar sin molestias, agacharme, levantar los brazos, subirme al bus, etc., puedo decir, con seguridad, que estoy curada, gracias a Dios. Luz María Gordillo – Templo de la Fe
Si usted se encuentra en una situación sin salida, lo esperamos este sábado 24 de marzo a las 7H. En la Iglesia Universal más cercana a su hogar.