Jorgito es un niño de tan sólo 11 años de edad, que después de recibir durante tres años quimioterapias, medicamentos y visitas recurrentes al hospital, ha aprendido a vivir con una enfermedad que trata de olvidar día con día; cáncer a la sangre o también conocida como leucemia. Este pequeño, después de un largo proceso que incluyó el envío a España de su historial clínico, diagnósticos y exámenes tanto del niño como de los posibles donantes, es uno de los cinco menores que serán operados en España gracias al dinero recaudado en la carrera '7k Yo corro por la Cruz Roja' patrocinada por la Iglesia Universal, Cruz Roja, Fuerza Joven Universal (FJU) y otros auspiciantes.
Lo interesante de este evento es que era inclusiva. Ya que, participaron atletas de élite, aficionados, discapacitados, adultos mayores y niños.
En total 4.202 corredores con chip y sin chip pasaron la línea de salida, de los cuales 200 eran representantes de la FJU, llegaron al Estadio Alberto Spencer, la carrera fue el 1 de junio, a las 7 de la mañana.
La competencia recorrió 7 kilómetros, porque cada uno representaba los principios de la Cruz Roja, que son: humanidad, imparcialidad, neutralidad, independencia, voluntariado, unidad y universalidad.
"Esta es una carrera de familia, inclusiva, donde todos tenemos la oportunidad, no de llegar primero, sino de competir. El objetivo es que la población ecuatoriana conozca que hay una institución que se une a otras entidades para salvar vidas", indicó Felipe Bazán Montenegro, presidente de la Cruz Roja del Guayas.
Cerca de 5.000 personas asistieron al evento, donde hubo atracciones para todos los gustos.