Aproximadamente a los 9 meses de edad, mi hija fue detectada con Neurofibromatosis tipo 1.
Esta enfermedad causa problemas en el cerebro, la visión, en partes del sistema óseo, los riñones, deficiencia intelectual, convulsiones, tumores benignos y malignos; ella no se sentaba solita ni gateaba como los demás niños, pasaba solo acostada y muy quieta.
Llegué a la Iglesia devastada por mi dolor, al participar de la reuniones, aprendí a usar la fe y empecé a poner en práctica lo que aprendía, use mi fe en el Dios de lo IMPOSIBLE y el milagro sucedió, mi hija fue curada, hoy ella puede caminar normalmente.