En aquel momento tan lindo y especial, que es el nacimiento de un niño, no nace solamente un hijo/a, sino que además nace un padre y una madre.
Desde ese día en adelante, los padres le enseñarán todo lo que saben a ese niño/a. Pero lo que pocos se dan cuenta es que los hijos también les enseñan mucho a sus padres. Para absorber esas enseñanzas, es necesario que los padres estén atentos a sus reacciones frente a las actitudes de sus hijos.