>> Mi mayor conquista fue recibir el bautismo con el Espíritu Santo…
A través de una invitación, llegué a la Iglesia Universal con la vida destruida, no había una sola área en donde me estuviera yendo bien.
Siguiendo las direcciones de la palabra de Dios, perseverando y entregándome por completo a Él, mi vida cambió.
Mi mayor conquista que fue recibir el bautismo con el Espíritu Santo, llegó después de una campaña, a partir de ese momento todo se transformó.
DIOS ME DIO UNA SEGUNDA OPORTUNIDAD
“La primera vez que llegué a la Iglesia mi vida cambió, pero dejé de asistir y al alejarme de Dios las cosas comenzaron a salir mal. En mi matrimonio surgían problemas tras problema, sufría maltratos, humillaciones e infidelidades. Cansada de todo decidí poner un basta, volví a la IURD, le pedí a Dios una segunda oportunidad, me bauticé en las Aguas y luego de buscarlo intensamente, recibí el bautismo con el Espíritu Santo. Hoy tengo paz junto a mi esposo e hijas, pasé de estar desempleada a tener mi trabajo fijo y tengo muchas razones para seguir viviendo.
Hoy soy una persona feliz y bendecida. Me casé en el Altar, monté mi propio negocio (una papelería), no sufro de ninguna enfermedad y tengo paz; todo esto gracias a la presencia de Dios en mi vida. «