Sea sincero: ¿usted tiene sueños?, ¿Por qué no los ha alcanzado?, ¿ha intentando concretarlos? Un sin fin de individuos tiene grandes anhelos. Algunos en determinado momento se arman de valor y trabajan para lograrlos, pero son muchos los que desisten cuando pasan por problemas, desechando así el es fuerzo que ya han hecho y se olvidan de lo que querían realizar.
Para cumplir un sueño no es suficiente saber qué es lo que se quiere, es necesario dotarse de determinación y perseverancia. Ya lo dice el refrán: “El que persevera, alcanza”.
Si usted está luchando por su salvación, por ser mejor en su lugar de trabajo, ser mejor hijo, padre, esposo, etc.
Entonces no se desanime ante el primer obstáculo, no importa que lo tachen de loco o terco. Si es lo que usted quiere, trabaje por ello.
Piense cuáles son esas pequeñas acciones que le generaran el gran cambio y llévelas a cabo. Lo vital en la lucha por la conquista de sus sueños es no darse por vencido, no bajar la guardia ante las dificultades. Si es lo que usted quiere, trabaje por ello.