Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo…” (Efesios 5:15-16)
1.-Tiempo para Dios:
No es inteligente no tenerlo en primer lugar en su vida, solamente la justicia que viene de lo Alto, es decir, la justicia perfecta que trae el verdadero equilibrio para ambos, ya que sin justicia no puede haber amor.
2.-Tiempo para la persona amada:
Este es uno de los mayores motivos de quejas en una relación “no me das tiempo”.
Es impresionante como muchos hombres a pesar de que trabajan duro, tienen tiempo para los amigos, la mamá, para el ocio, pero nunca para su cónyuge; y muchas mujeres no se quedan atrás, están muy ocupadas con sus hijos que no le dan tiempo a su marido.
3.-Tiempo para los hijos:
Independientemente si es recién nacido o un adolescente, él necesita tiempo con sus padres, ya que de ellos aprenderán buenos valores y el respeto. Hoy lastimosamente la tv y la calle están mal educando a muchos hijos.
4.-Tiempo para el trabajo y el estudio:
Nada puede ser descuidado, no existe falta de tiempo, existe falta de prioridades.
Solteros: ¿Cuándo es el tiempo o la edad correcta para tener novia (o)?
Usted debe hacerse esta pregunta primero ¿Estoy listo para casarme? Si su respuesta es, ¡SI! Usted puede comenzar a conocer a alguien para una futura relación.
Si su repuesta es, ¡NO! Entonces, no busque tener un noviazgo, el Noviazgo Cristiano es para casarse y no apenas para tener con quien salir, o tener a alguien para divertirse.
Terapia del Amor Una reunión para resolver y prevenir dificultades en el área sentimental. JUEVES 7H, 10H, 12H, 15H y 19H, en la Av. de Las Américas 305 ó en la Universal más cercana a su hogar
“Entregué mis miedos e inseguridades a Dios y Él me bendijo”
Los malos ejemplo que la señora Narcisa veía dentro de su casa, hicieron que ella creyera que nunca iba a tener una vida sentimental realizada.
“Pensaba que nunca iba a ser feliz en la vida sentimental, ya que, veía diversos ejemplos de personas que no eran feliz en esa área y pensaba que yo también iba a terminar así”
Entonces, comenzó a participar de las reuniones de la Terapia del Amor y vio los cambios que acontecieron de adentro hacia afuera. Poco tiempo después, conoció a su esposo Alfredo.
“Empecé a luchar por mi vida sentimental en la Terapia del Amor, comprendí que para triunfar en esa área tenía que trabajar junto con Dios, es decir, tenía que empezar a quitar y añadir cosas en mí, para volverme la persona idónea para alguien más. Fue así que entregué todos mis miedos e inseguridades a Dios, Él me bendijo con mi esposo Alfredo, juntos servimos a Dios y somos muy felices”, concluye.