En Portoviejo, provincia de Manabí el pastor Rodrigo junto a voluntarios de la Iglesia Universal en la localidad teniendo en consideración los estragos del terremoto que afectó a muchas familias en dicha ciudad realizaron la entrega de 50 fundas con alimentos no perecibles y galones de agua, los mismos que fueron donados por los miembros de la Universal de la ciudad de Quito.
Consientes de que la necesidad del pueblo que fue afectado no será apenas por algunos días, los voluntarios siguen semana a semana recolectando alimentos, agua y ropa para a la brevedad posible hacerle llegar esta ayuda solidaria a quien lo necesite.
Con el lema “SOLIDARIDAD NO TIENE RELIGIÓN” los voluntarios a más de dar esta ayuda transmiten a aquellos que lo perdieron todo una palabra de fe que anima y reconstruye en el interior de cada persona los sueños que fueron derrumbados, para fortalecerlos y así confíen en que Dios les dará una nueva vida.