Las deudas, los gastos en el médico, las peleas con su conyugue, la rebeldía de los hijos, el vicio de un familiar, la indiferencia de los “amigos”, lo que están hablando de usted a sus espaldas, el desamor de su pareja, el sentimiento de no ser considerado por quienes ama, lleva a muchos a sentir que la vida es un peso imposible de seguir sobrellevando.
Pero ahora, a pocos días de que este año 2019 haya empezado, queda la pregunta ¿qué haré para que sea diferente?, ¿cómo preparar las bases para alcanzar en este año mis objetivos? Para tener un año mejor es necesario dejar de preocuparse tanto y pasar a actuar con la dirección de Dios sin miedo de fracasar, para esto es necesario llenarse del Espíritu de Dios y Él le dará la fuerza, temple y valor para hacer lo que debe hacer.
La preocupación me tenía mal
“Tenía mucha preocupación a causa de un problema que se me presentó, esto me provocó una tensión en el cuello, me dolían los hombros, la espalda y el corazón. Incluso de camino hoy para participar en la Concentración de Fe y Milagros, parecía que me iba a desmayar por la tención; por otro lado, desde hace algún tiempo comencé a tener dolor en la columna, no podía agacharme porque el dolor se intensificaba y debía presionar esa área de mi cuerpo duro con mi mano, para seguir caminando, pero vine dispuesta a manifestar mi fe en contra de lo que sentía y salir de la reunión curada y así como determiné sucedió, bebí el Agua Bendita cuando se realizó la oración e inmediatamente el dolor y la tención desaparecieron, me siento leve, relajada y consigo flexionar mi espalda sin ningún tipo de dolor, gracias a Dios”, culmina feliz la señora Ángela.
Participe todos los domingos de la Concentración de Fe y Milagros, a las 9H, en la Av. de Las Américas 305, Norte de Guayaquil o en la Iglesia Universal más cercana a su hogar y reciba la misma oportunidad que tuvieron miles de personas, para poder cambiar el rumbo de sus vidas.