Hechos 16
27 “Al despertar el carcelero y ver abiertas todas las puertas de la cárcel, sacó su espada y se iba a matar, creyendo que los prisioneros se habían escapado.
28 Mas Pablo clamó a gran voz, diciendo: No te hagas ningún mal, pues todos estamos aquí”
La voz de Pablo fue más fuerte que la voz del diablo en la cabeza del carcelero.
29 “Entonces él pidió luz y se precipitó adentro, y temblando, se postró ante Pablo y Silas, y después de sacarlos,
dijo: Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo?”
Minutos atrás él era el responsable de la prisión.
En respuesta a la oración de Pablo y Silas Dios se manifestó para liberarlos y salvar aquel hombre y a su familia.
Vea cómo Dios cambia la situación cuando manifestamos la fe.
Todo puede cambiar de la noche a la mañana.
El carcelero hizo la pregunta que todos queremos escuchar:
¿Qué debo hacer para ser salvo?
31 “Ellos respondieron: Cree en el Señor Jesús, y serás salvo, tú y toda tu casa.
32 Y le hablaron la palabra del Señor a él y a todos los que estaban en su casa.
33 Y él los tomó en aquella misma hora de la noche, y les lavó las heridas; enseguida fue bautizado, él y todos los suyos”.
Mire el cambio
34 “Llevándolos a su hogar, les dio de comer, y se regocijó grandemente por haber creído en Dios con todos los suyos.”
Lo que Dios hizo en el pasado también lo hace en los días de hoy.
El domingo 14 comenzaremos la semana de la salvación de la familia. Acérquese a una Iglesia Universal y participe este domingo.
Horarios: 6h, 7h, 8h30, 10h, 12h, 15h, 17h30
Templo de la Fe: Av. de Las Américas 305 norte de Guayaquil y en todas las Iglesias Universal del país, haga clik aqui.