El tiempo para que el problema que está enfrentando sea resuelto, dependerá del tiempo que a usted le lleve APRENDER algo con el mismo. Pues todo problema siempre traerá lecciones para nuestra vida, de aquello que necesitamos aprender y de lo que necesitamos cambiar. Veamos 3 lecciones que se aprenden cuando se “está en aprietos”.
1ª: Intentarán callarlo
Siempre surgirán personas que intentarán callar su fe y sueños – diciendo que usted no puede, que no es capaz, que está soñando mucho. Sin embargo, una cosa es que ellos lo intenten y otra que lo consigan. Su vida financiera puede estar en el fondo del pozo, pero aun así debe mantener su fe por encima de todo, ¡confiando en que todo eso se transformará en su testimonio!
2ª: La providencia vendrá de donde menos lo imagina
Lo que usted necesita vendrá de donde menos lo imagina, así que no se angustie por la situación. Aunque su vida se encuentre en el fondo del pozo, su fe y confianza no pueden estarlo. Continúe creyendo y confiando.
3ª: El socorro viene de lo alto
Puede parecerle que la situación en la que está lo llevará a la muerte, sin embargo, es sólo el principio de una gran victoria, porque Dios no desamparará a aquellos que confían en Él. Por lo tanto, no se preocupe con las circunstancias a su alrededor, ¡sepa que su respuesta vendrá!
Mi vida estaba limitada…
Mi vida económica era muy precaria, casi nunca había qué comer, vivíamos en una casa de caña, en invierno, llovía más adentro que afuera de la casa, cocinábamos con leña o carbón porque no había para comprar un cilindro de gas.
Pero después que hice un pacto con Dios en el Congreso para el Progreso, a partir de ahí todo cambió, construimos una casa digna, hoy tenemos para comer y vestir lo que nos gusta, viajamos a donde nos plazca, además Dios cambió mi visión, me gradué de Ingeniera en comercio exterior. Gracias a mi pacto con Dios alcancé la estabilidad económica.
Mi pacto con Dios abrió mi visión y pude salir de aquella miseria que me limitaba.
•• Srta. Katiusca Pita