Si saliera todo mal, ¡va a VENCER!
Todo le había salido mal a Abraham.
100 años sin hijo.
¡Él venció!
Todo le había salido mal a Moisés.
El mar sería el fin.
¡Él venció!
Todo le había salido mal a José.
Vendido como esclavo.
¡Él venció!
Todo le había salido mal a Daniel.
Dentro de la cueva de los leones.
¡Él venció!
Todo les había salido mal a Sadrac, Mesac y Abed-nego.
Querían quemarlos.
¡Ellos vencieron!
Y cuántos otros en la Biblia, y hoy, vieron que todo salía mal, sin embargo, no abandonaron la fe, y permanecieron en la visión del Altar.
¡Ellos vencieron!
¡Todo lo que está saliendo mal hoy, será el testimonio mañana!
¡El secreto es comenzar e ir hasta el fin!
¡VA A VENCER!