Inevitablemente, todos a veces al ir de compras se dirigen a sus tiendas favoritas: a los libros y juguetes. 12 años han pasado, y la escena se repite …
Desde la última vez que eso sucedió, algo me tocó, y empece a disminuir esa escena de mi vida que repetí tantas veces. Tal vez para otros sea algo insignificante, pero comenzó en mi algo nuevo.
En este último «tour» comencé a buscar los juguetes con mvtivos de diseños infantiles (ya sabes, esos hermosos que incluso los adultos amamos): Strawberry , princesas, etc.
Habían esas «cosas atractivas», entre juguetes, cuadernos, novedades y más… y aquellas botellitas de agua rosada, para niñas del jardín de infantes. Ese día me di cuenta que aquella fase ya no volvería, ya quedó atrás, y dejó en mi sólo en el deseo de tenerlos otra vez.
Y, de hecho, cada vez que mi hija entra en las tiendas, y lo quiere todo de nuevo, aunque sólo sea para mirar y «se enamoró» es como un mensaje en clave para los dos, aunque las ganas aun existan, ya esa fase pasó, porque ya no encaja con el tamaño, el peso, la altura, la madurez…
Las faces que vivimos son únicas, verdaderas y con sus peculiaridades, al mirar detalladamente la tienda de juguetes, me di cuenta y enfrenté mi fase actual.
Tal vez esta es la razón por la que muchas mamás siempre están diciendo “¡Dios mío Mi hija creció y ni cuenta me di, como el tiempo pasa rápido! ” En realidad no fue solamente el tiempo que paso demasiado rápido, llevándose lentamente cada esplendor de las fases anteriores, pero muchas veces, ni nos damos cuenta de aquel precioso tiempo, y aquella preciosa fase que no se repetirá jamás.
Estar consienten cada fase puede hacer que usted valorice y aproveche al máximo, en lugar de querer pasar por delante de las dificultades que se presentan. En realidad esa etapa va a pasar, también las dificultades, el esplendor y toda la belleza, y la nueva etapa va a comenzar y aun más va a ser para usted un nuevo desafío desconocido quien también cometerá sus propias peculiaridades, dificultades y bellezas.
Unos de los autores más reconocidos sobre ese tema es Jean Piaget, estudio detalladamente todas las fases del desenvolvimiento el niño y la psicogénesis del conocimiento. Este autor clasifica el desarrollo intelectual cognitivo de los niños en pasos o etapas, con cada etapa sigue una secuencia y el momento de cierta permanencia, por el cual el niño va de lo básico a conceptos complejos, cada pre-requisito para la próxima.
No es por nada que un hombre sabio escribió: «Para todo hay un tiempo, y un tiempo para cada suceso bajo el cielo:»
Vale la pena vivir bien cada etapa única de nuestra vida.