La gloria de Dios sobre el Templo es muy fuerte.
Hace pocos meses yo tenía un dolor de cabeza insoportable. Ya había orado y había participado en la Cadena de Liberación. Una mañana me indigné y agarré una foto del Templo de Salomón que está en un calendario del año 2013 que me dieron en la Universal.
Coloqué la foto sobre mi cabeza y Le pedí a Dios que la gloria que ya está sobre el Templo viniese sobre mi cabeza. Y fue en ese mismo momento que el dolor desapareció, como si lo hubiese sacado con las manos.
Ahora imagínese dentro del Templo, ¡cómo será esa gloria!
Estamos en esa fe.
Elias Marinho
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Realmente el Templo es algo grandioso.
Desde el primer momento que el obispo lo dijo, en una reunión en João Dias, un domingo a la mañana, tuve la certeza en mi ser de lo que esta obra representaría. Me alegro con su finalización, y testimonio que nunca dejé de ayudar.
Mensualmente, a cada solicitud, a cada bazar, a cada producto lanzado con el fin de ayudar para el Templo, participé. Tuve los aumentos de la ley en mi salario, sin embargo, mi dinero ha rendido…Sí, multiplicado. Pago todo, compro lo que necesito e incluso contribuyo más y más. Mi cuenta corriente tiene saldo.
No podemos olvidarnos de que esta obra no se refiere solo a las paredes físicas, las de albañilería…Son paredes espirituales. Esta obra tiene un significado espiritual todavía mayor que su grandiosidad física. En el ámbito espiritual, la construcción del Templo es un mojón en la guerra que trabamos diariamente. Más que nunca, la necesidad de corregirnos, purificarnos y prepararnos para el regreso del Señor Jesús.
Ese día está cerca, muy cerca. Es fundamental que todos los que contribuyeron financieramente, y están maravillados y ansiosos por conocer el ambiente físico, se preparen espiritualmente.
Creo que el Espíritu de Dios desea construir Templos más grandes y más fuertes en cada uno de nosotros. Hacer que cada persona sea un soldado valiente, fiel para esta lucha, cuya batalla final está cerca, además de ganar más y más almas para formar ese ejército.
Purificación, santificación, vida íntima con Dios, fortalecidos, avivados en el Espíritu Santo: Todo eso tiene que estar en nuestra mente.
Nuestras acciones, más que nunca, deben ser bien analizadas. Vigilancia espiritual redoblada.
Ferreira.