¿Usted ya se preguntó por qué realmente desea recibir el Espíritu Santo?
Muchos tienen la ilusión de que cuando Lo reciban conquistarán de manera automática las bendiciones económicas, la felicidad amorosa, incluso más responsabilidades, prestigios y títulos en la iglesia. Y tienen como objetivo solo eso. Debido a esas intenciones equivocadas, el bautismo con el Espíritu Santo no sucede.