El poder de la oración te ayuda a superar las dificultades y alcanzar la victoria. Es capaz de atacar y destruir todo mal y, al mismo tiempo, te fortalece y trae paz a tu ser interior.
La oración tiene poder:
Pero yo invocaré a Dios, y el Señor me salvará. Tarde, mañana y mediodía oraré y clamaré, y él oirá mi voz.
Salmos 55:16,17
La mayoría de la gente ora poco: un poco al despertarse, antes de irse a dormir, un poco más en la iglesia, pero no tienen una vida de oración que les ayude a vencer el mal. A veces, cuando se encuentra ante un problema grave que debería impulsarla a intensificar su oración, pide a otros que oren. La Biblia muestra varios casos en los que ocurrieron milagros a través de la oración, como la liberación de Pedro de la prisión mientras la iglesia oraba (Hechos 12:5-12).
Quienes oran no tienen límites y experimentan cosas sobrenaturales. El problema es que, en lugar de orar cuando, por ejemplo, el negocio va lento, te quejas, murmuras y te lamentas. Pero dudo que la situación no cambie si oras y decides cambiar. Si fueras una persona de oración, sin duda obtendrías más victorias —afirmó el obispo Jadson Santos durante la charla «Prosperidad con Dios».
La oración demuestra dependencia de Dios:
Es a través de Ella que depositas sobre Él tus miedos, tus angustias, tus dudas, todo lo que te pesa.
¿Vas a una audiencia o a una reunión importante? Ora. Habla con el Señor siempre que puedas y, si no puedes hablar, permanece en un espíritu de oración, conectado con Él en pensamiento. No dependas solo de las oraciones de los demás —enseñó el Obispo.
Ella es un arma espiritual:
La oración combate el mal espiritual, las personas que hablan mal de ti a tus espaldas, que te calumnian. Rompe el poder de la mentira y el mal. Daniel perseveró en la oración, y cuando recibió la bendición, el ángel le dijo que había una guerra espiritual mientras estaba orando (leer Daniel 10:12-13).
Físicamente, puede que tengas pocos a tu lado, o incluso que estés solo. Pero si estás con el Todopoderoso, espiritualmente hay un ejército de ángeles luchando a tu lado. No temas. Puede que te abandonen, pero Él está contigo —dijo.
Después de orar, confía:
¿Oraste, te desahogaste, determinaste? Confía en que el Padre te ha escuchado, ha actuado y traerá la respuesta.
Los seres humanos somos frágiles y todo en esta vida pasa. Pero Dios es un refugio seguro para quienes confían en Él. Y con esta confianza vienen la paz, la fuerza, el apoyo y las condiciones para permanecer firmes en medio de las dificultades. Él no falla —añadió el Obispo—.
Participar:
La reunión de “Prosperidad con Dios” se lleva a cabo los lunes, en el Templo de los Milagros . Los horarios son 7am, 10am, 12pm, 3pm, 7pm.
También puedes acudir a la iglesia Universal más cercano. Encuentra la dirección aquí .
