La Unisocial de la ciudad de Quito se hizo presente en esta ocasión, en el norte de la ciudad, específicamente en el sector de Cotocollao, más de 70 personas recibieron ayuda solidaria, se hizo la entrega de viandas con alimentos preparados, pero sobre todo se les dio una Palabra de fe y esperanza, esta los sustentará en los momentos difíciles.
DIOS TRANSFORMÓ MI VIDA
Antes de llegar a la Iglesia Universal mi vida estaba completamente destruida, me encontraba muy enferma, buscando una cura visité brujos, allí al inicio me decían que si podían ayudarme, que tenía que pagar cierto valor monetario para poder hacerme limpias y arrancar el mal que había en mi cuerpo, hice todo lo que me decían, pero nada daba resultado, en lugar de haber un cambio todo empezó a empeorar.
Mi matrimonio se destruyó, mi esposo y yo nos separamos, económicamente estaba en la ruina, ya que había gastado todo buscando una cura para mis enfermedades. Ya no sabía qué hacer, los médicos me habían desahuciado, me dijeron que solo esperara la muerte. Mi angustia era tan grande que no podía dormir por las noches, solo quería morirme. Fue así que llegué a la Iglesia Universal, un día recibí una invitación y me dijeron que no importaba el problema que tuviera, había una esperanza para mí, no lo pensé 2 veces, asistí a la reunión, empecé a usar mi fe y Dios transformó mi vida. Hoy estoy libre de todo los males espirituales que tenía, fui curada y tengo la presencia de Dios en mí.
•• Sra. Carmen Sánchez