“He aquí el Temor del Señor es la sabiduría, y el apartarse del mal es el entendimiento.” Job 28:28.
Aquí podemos entender que quien tiene Temor es sabio, pues, es a través de la sabiduría que una persona mantiene su Temor para con Dios. El Temor hace parte de una de las siete manifestaciones del Espíritu Santo, que es la séptima punta del candelabro:
“Reposará sobre él el Espíritu del Señor, el Espíritu de sabiduría y de entendimiento, el Espíritu de consejo y de fortaleza, el Espíritu de conocimiento y de TEMOR DEL SEÑOR.” Isaías 11:2
La palabra Temor tiene dos significados: respeto y miedo.
En primer lugar, vamos a hablar sobre Respeto: Cuando la persona realmente tiene Temor a Dios, ella Le respeta y Le considera, encima de todas las cosas.
En la vida de quien tiene Temor a Dios, ÉL está presente en primer lugar, y hacer Su Voluntad tiene que ser la prioridad para aquel que dice tener Temor a Dios. En cuanto a tener respeto a Dios, ÉL mismo dijo y Se desahogó:
“El hijo honra al padre, y el siervo, a su señor. Si Yo Soy Padre, ¿dónde está Mi Honra? Y, si Yo Soy Señor, ¿dónde está el respeto para Conmigo? Dice el Señor de los ejércitos a vosotros.” Malaquías 1:6
En segundo lugar, ahora vamos a hablar sobre el Miedo: Quien tiene Temor a Dios, tiene miedo de hacer algo errado, que venga a entristecerle. Este miedo no se refiere a pavor, y si al miedo de pecar, de entristecer y desagradar a Dios. Cuando la persona tiene Temor, ella no va a tocar aquello que no le pertenece, no va a mirar para donde no debería, no va a caminar por donde no es aconsejable y no va a hacer lo que es errado, o sea, lo que no debería hacer.
“El Temor del Señor es la Fuente de Vida para evitar los lazos de la muerte.” Proverbios 14:27
Es por la falta de este Temor que muchos no conservarán la salvación. Ellos cometerán graves delitos contra el prójimo y, principalmente, contra Dios.