Una de las mayores dificultades de las personas, actualmente, además de PEDIR perdón, es ceder el perdón.
Pero la verdad es que el resentimiento solo genera perjuicios a la misma persona que lo carga (Mateo 6:9). La persona queda presa al pasado, constantemente recuerda el mismo dolor y sufre a raíz de esto, sintiéndose cargada y sin paz.