Este martes 11 de febrero te esperamos en la Reunión de Sanidad
Es un trastorno muy frecuente que se produce cuando la parte superior del estómago se extiende a través del diafragma, que es la capa muscular que separa el tórax del abdomen.
El diafragma cuenta con una abertura a la que se le conoce como hiato, a través del cual pasa el esófago (que es el conducto de la comida que va de la boca al estómago). No obstante, en la hernia hiatal, la parte superior del estómago «empuja» hacia arriba, desplazándose por ese orificio e ingresa al tórax.
Los especialistas informan que, cuando esta hernia es pequeña, no genera problemas para el paciente. Incluso, afirman, es posible tener una y no percibirla, a menos que un médico la descubra mientras trata otra afección. Algunos de los síntomas son acidez estomacal, regurgitación de los alimentos, reflujo, dificultad para tragar, dolor abdominal o en el pecho y falta de aire.
Causas y complicaciones
Aún se desconoce exactamente cuáles son las causas de este padecimiento. No obstante, podría desarrollarse por cambios en el diafragma debido a la edad, lesiones en el área por cirugía, nacer con un hiato grande o por presión persistente e intensa en músculos circundantes, por ejemplo, al toser, vomitar, evacuar y hacer ejercicio.
Una hernia hiatal puede aprisionar el órgano y estrangularse. Incluso, existen casos en los que puede provocar una hemorragia digestiva oculta o masiva. En ocasiones, este problema de salud requiere de cirugía.
Reunión de Sanidad
Todos los martes en las Iglesias Universal se realiza la Reunión de Sanidad. Si tú o uno de sus seres queridos tiene problemas de salud, ¡no pierdan la oportunidad de asistir! A través de la fe es posible cambiar esa situación.
Los esperamos en el Templo de los Milagros: Avenida Americas #305 Norte de Guayaquil. O en la Iglesia Universal más cercana.
(*) La Iglesia Universal aclara que todos los conceptos emitidos en este portal, así como la programación de radio y de televisión, son cuestiones de fe, en modo alguno deben ser interpretados como elementos con atribuciones terapéuticas, en demérito de la medicina, ni de quienes la practican. NO DEJES DE CONSULTAR A TU MÉDICO.