¿No tiene un minuto de paz, vive atormentado y con miedo?. Eso es lo que el mal hace en la vida de las personas. Lo rodea por todos lados y con diversos problemas: destruye la familia, el matrimonio; causa enfermedades, adicciones, miseria, insomnio, miedo, síndrome de pánico, depresión y tormentos constantes y por más intentos que haga nada funciona.
La reunión de Liberación Espiritual, efectuada los viernes, está dedicada a combatir a través de la fe y la autoridad del nombre del Señor Jesús a todos los males espirituales que han actuado para trabar todas las áreas de su vida.
“ESCUCHABA VOCES QUE ME DECÍAN QUE IBA A MORIR”
Mi padre nos abandonó por irse con otra mujer, tiempo después mi madre también me dejó, me sentía rechazada y mostraba ese sentimiento a través del trato que tenía con las demás personas.
En mi adolescencia sufrí con complejos de inferioridad, inseguridad y miedos. Tiempo después empecé a ver bultos, escuchar voces, las cuales me llamaban por mi nombre y me decían que iba a morir.
Dentro de mí había un vacío y angustia, quería quitarme la vida, un día pensé en cortarme las venas del brazo con un cuchillo para acabar con mi vida. Desde el primer día que participé de la reunión de liberación, percibí cambios en mi vida y en mi interior, pasé a tener paz, dormir bien y tuve una razón para vivir. Con el tiempo, entendí que necesitaba tener un compromiso con Dios y tener el Espíritu Santo, entonces lo busqué y cuando lo recibí todo fue transformado.
Hoy soy feliz, libre de todos los males que me atormentaban, pero sobre todo tengo lo más importante, la Presencia de Dios en mi vida.
•• Sra. Michella