El joven tiene múltiples intereses: Una vida variada, basada en su red social, sus amigos, sus actividades sociales, su música, su TV, su cine, sus fiestas y paseos, sus deportes, sus conciertos, sus amistades y romances, sus videojuegos, sus gustos. En ocasiones se siente poderoso, omnipotente ante el pasado y las generaciones anteriores tanto por la naturaleza de ser joven, como porque realmente la vida hoy le ofrece más condiciones, herramientas, posibilidades y oportunidades que a cualquier otra generación, así como porque posee habilidades y herramientas que superan a la de las generaciones anteriores y la de sus «superiores» y orientadores.
El joven debe de ser inteligente y utilizar todas estas herramientas para construir su vida académica y triunfar en el futuro en su vida laboral.
El pastor Walber Barboza dedicó un espacio en la reunión para hacer una oración por los estudiantes para que nunca desvíen su camino, que no consuman drogas y no se relacionen con malas amistades, enseñó a los padres que la educación es un derecho y que ellos son los responsables de infundir valores para que crezcan en la fe verdadera, porque el pueblo de Dios debe marcar la diferencia, y no se debe permitir por ningún motivo que la responsabilidad económica del hogar se pase a las manos de los hijos, ellos son los menos indicados para trabajar porque deben estar concentrados en su formación académica y se sienten ricos por ganar un “dinerito”, pero si continúa así ganarán un dinerito toda la vida.