Ya se fue más de la mitad del año y es el momento de reflexionar. Talvez haya planeado muchas cosas o realizar sueños personales. Aunque este es un año atípico por la pandemia, debe saber que las adversidades pueden ser oportunidades disfrazadas. Sin embargo, ¿qué hizo usted para alcanzar sus objetivos?
La opción más fácil y la más adoptada por la mayoría es, acomodarse, esperar que la pandemia pase, que la economía del país mejore, que el año se acabe, etc.
El conformismo es el real enemigo y hace que la materialización de los sueños quede cada vez más distante. En contrapartida, usted puede arremangarse las mangas, levantarse, sacudirse el polvo e ir en búsqueda de sus ideales.
Aunque la realidad parezca ruin, actitudes aliadas a la fe inteligente cambian cualquier escenario de fracaso.
Y cuando hablamos de fe nos referimos a aquella que trae a la existencia lo que no existe, ¿usted la ha usado en su vida?
“Mi pacto con Dios me llevó a superar las dificultades”
«Tan pronto como llegó el decreto del estado excepción, comenzamos a evaluar qué caminos debíamos seguir», recuerda.
Leo explica que en el Congreso para el Progreso aprendió que un Pacto con Dios vence cualquier obstáculo, por eso decidió enfrentar el desafío. «Podríamos haber entrado en pánico o simplemente esperar a que pase la cuarentena, pero decidimos reinventarnos y hacer de los limones, limonada», comenta.
«Comencé a usar la tecnología a favor de mi negocio. Potencializamos los contactos en línea y hemos tenido éxito. Hacemos servicios y ventas incluso con clientes de otros países. No tuvimos perdidas, porque todos estábamos conando en Dios y no en las circunstancias del momento”, finaliza.