Igualmente, jóvenes, estad sujetos a los ancianos; y todos, sumisos unos a otros, revestíos de humildad, porque Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes. Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que Él os exalte a su debido tiempo. Echad toda vuestra ansiedad sobre Él, porque Él tiene cuidado de vosotros. Sed sobrios y velad.
1 Pedro 5:5-8