Hoy es muy común que las personas se quejen de que no tienen suerte en el amor. Sin embargo, lo que ellas no ven y reconocen es que todas las cosas negativas que suceden en sus relaciones son frutos de sus propias actitudes y no el resultado del azar. Cada uno es responsable de su vida amorosa, y si esta se encuentra mal es porque simplemente no se ha hecho lo correcto.