El Señor Jesús dijo:
“Vosotros sois la luz del mundo…” Mateo 5:14
El diablo conoció y contempló la Gloria de Dios en los cielos, la misma que hoy se refleja en el hombre que fue iluminado con el Espíritu Santo. Por eso, tiene tanta envidia e intenta apagar a aquellos que se han convertido en la Gloria de Dios en la tierra.
El mal puede ver esa luz, la Gloria de Dios en nosotros, él también un día fue iluminado cuando habitaba en los cielos.
Pero si esa luz está apagada, no sirve para nada.
Entonces, ¿cómo intenta apagar esa luz?
Haciendo que la persona cambie la gloria de Dios por la gloria del mundo.
“Otra vez Le llevó el diablo a un monte muy alto, y Le mostró todos los reinos del mundo y la gloria de ellos, y Le dijo: Todo esto Te daré, si postrado me adorares. Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a Él solo servirás.” Mateo 4.8-10
El Señor Jesús no cambió la Gloria de Dios que estaba en Él por la ofrecida por el tentador. Sin embargo, muchos la han cambiado y han dejado de servir a Dios para servirse a sí mismos, al mundo y al diablo.
Aquellos que decidan dar y también ser la Gloria de Dios aquí en esta tierra, un día estarán reunidos allá en los cielos, donde el diablo no puede ir.
“DESPUÉS de esto oí una gran voz de gran multitud en el cielo, que decía: ¡Aleluya! Salvación y honra y gloria y poder son del Señor Dios nuestro…” Apocalipsis 19:1
Dios bendiga a los que creen.