En días anteriores, en nuestra Iglesia Universal de Santo Domingo recibimos el apoyo de una señora, que conmovida por la situación y acudiendo a nuestro llamado de ayuda al prójimo, realizó esta gran donación de alimentos, lo cual nos permitió conformar los kits que fueron repartidos por los pastores a las familias más necesitadas en algunos sectores de esta ciudad y sus alrededores.
Es por este motivo que queremos agradecer a todos por el apoyo que nos han brindado y les recordamos que las puertas de cada Universal a nivel nacional continúan abiertas, no para realizar reuniones ni aglomeración de personas, sino para recibir su ayuda voluntaria y así poder alcanzar los lugares donde todavía no hemos llegado.