Las circunstancias a veces exigen que cambiemos de espíritu. Muchos cambian de un espíritu bueno para un espíritu malo, delante de las circunstancias.
Por ejemplo:
- La buena esposa que fue traicionada y maltratada, decide ahora vengarse de los hombres.
- El trabajador honesto que siempre vivió en aprietos decide ahora entrar en esquemas para ganar más dinero.
- Alguien justo, que sufre una injusticia en el trabajo, en él, entra el espíritu de la venganza contra el patrón.
Por tanto, si no estamos sintonizados a las circunstancias, y a lo que ellas están exigiendo de nosotros para superarlas, seremos superados por ellas.
No dejes que sus circunstancias creen un espíritu malo en usted.
ISRAEL
Las Circunstancias de paz y sosiego por 40 años hicieron a Israel buscar novedades y se envolvieron con los dioses de los enemigos.
Cambiaron el espíritu fiel a Dios, por un espíritu idólatra. Por eso, para cambiar la situación de Israel, Dios dirigió a Gedeón para provocar un cambio. Derrumbar el altar de Baal, edificar el Altar del Señor en el lugar más alto y sacrificar el segundo toro, fue la estrategia de Dios para crear circunstancias que cambiasen la mentalidad de todos.
– Cambió la mentalidad de Gedeón – Cambió la mentalidad del padre de Gedeón.
– Cambió la mentalidad de las personas de la ciudad. Es eso que Dios nos llama a hacer para cambiar nuestra situación. Si Él está permitiendo que sus circunstancias le provoquen, es porque quiere que su espíritu actúe a la altura. ¿Qué piden las circunstancias a su espíritu?
– Siga los mismos pasos de Gedeón:
- ¿Hay algún altar de Baal en su vida? ¡Derrúmbelo!
- ¿El altar de Dios está en el lugar más alto de su vida? Si no lo está, entonces colóquelo.
- ¿Cuál es su segundo toro? Que nuestro espíritu sea exactamente lo que nuestras circunstancias piden.
Pues solo un espíritu fuerte vence las circunstancias difíciles.
“LO MATERIAL NO SUPLÍA NI LLENABA MI INTERIOR”.
Tuve una infancia feliz, estudié, me gradué en odontología y todo iba bien hasta ahí.
Pero, me involucré en una relación sentimental que me hizo mucho daño, de la cual tuve a mi primer hijo, quien mientras crecía sentía la falta de su padre y cuando me preguntaba sobre él yo le evadía el tema e intentaba suplir esa carencia comprándole todo lo que él quería, a causa de lo cual adquirí muchas deudas, eso me generó angustia.
Tiempo después me detectaron cáncer en el útero. Busqué más opiniones médicas y todos llegaron a la misma conclusión,tenía que operarme.
También me dio pancreatitis.
En ese momento de mi vida, recibí una invitación para participar de una reunión en la Iglesia Universal, a partir de ese día, mis pensamientos fueron cambiando.
Participé en varias Campañas de Israel, en las cuales tuve la oportunidad de sacrificar y hacer mi mayor expresión de fe por un cambio de vida. Así mi historia comenzó a tener un nuevo rumbo, pagué las deudas, fui totalmente curada del cáncer.
Dios me dio la oportunidad de expandir mi consultorio odontológico y colocar un segundo local.
Pero, lo más importante que conquisté en estos años es el Espíritu Santo en mi interior, Él me dio paz, alegría, me dio valentía, fuerzas y una nueva perspectiva de vida.
•• Paula Morales