Usted necesita creer en aquello que hace. Creer en su potencial, en su profesionalismo, en su producto, en su empresa, en su equipo. Es necesario creer al cien por ciento lo que hacemos. Si no creemos en lo que hacemos, aunque el mundo entero crea, nunca vamos a triunfar.
2.- Vea si lo que usted hace es la voluntad de Dios. No sirve de nada crecer de una manera deshonesta, mucho menos usando malos hábitos con los otros, haciendo de ellos una escalera.
3.- Tener conciencia que las dicultades vendrán. Es en los momentos más difíciles que usamos la fe. A veces los mismos son muy duros e incluso difíciles de entender, pero nos hacen crecer. “La mujer confiujo de sangre remó contra la marea, fue en contra de todo y de todos, pero venció su imposible. La dificultad fue el combustible para avanzar”.
4.- No se deje influenciar por nadie. Jesús no era influenciado, al contrario el influenciaba. Hay un dicho que dice “No es el lugar que influencía al líder, pero si el líder es quien influencía el lugar”
Está escrito: “Y muchos le reprendían para que callase, pero él clamaba mucho más: !!Hijo de David, ten misericordia de mí!” Marcos 10:48
¿Ya imaginó, si Bartimeo se hubiese dejado influenciar por los gritos de la multitud que lo mandaban callar?, seguramente hubiera continuado ciego.