“¿Robará el hombre a Dios? Pues vosotros me habéis robado. Y dijisteis: ¿En qué te hemos robado? En vuestros diezmos y ofrendas.” Malaquías 3 :8-10
Devolvemos los diezmo y las ofrendas para honrar a Dios, no para sustentarlo, si usted quiere que Dios lo honre, debe honrarlo primero, esa es una ley ja del Cielo, cuando lo hace está reconociéndolo como dueño de todo lo que existe en el mundo.
Muchos dirán que esa ley es del pasado y que ya no tiene validez, pero recuerde que el propio Señor Jesús dijo: “No penséis que he venido para abolir la ley… sino para cumplir” Mateo 5:17, también dijo “Pues dad al César lo que es del César, y a Dios lo que es de Dios”. Mateo 22:21.
Dios no acepta la deshonra, quien Lo deshonre será despreciado y el espíritu de la desgracia tomará cuenta de esa vida, porque no honró al Creador.
Muchos dicen que nacieron con mala suerte, pero no se trata de suerte, Dios dio a cada uno el poder de escoger la vida o la muerte, la bendición o la maldición y si usted elige honrar a Dios, Él también le honrará.
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Siempre confiaba en mi conocimiento y experiencia, ya que todo el mundo 
decía que yo era el mejor.
Llegué a la Iglesia Universal después de haber sido despedido del trabajo, allí aprendí que el verdadero éxito nace de nuestra fidelidad a Dios.
Desde que puse en práctica lo aprendido, a través de la devolución de los diezmos, mi vida cambió, hoy soy un empresario exitoso, tengo una vida transformada y sobre todo la presencia de Dios en mi vida.
•• Sr. Antonio