Después del terremoto de 7,8 que sacudió las costas ecuatorianas, miles de familias quedaron prácticamente sólo con la vestimenta que llevaban consigo el día del incidente, ya que a través de los derrumbes que se produjeron durante el terremoto perdieron además de sus pertenencias, muchos también la vida de sus seres queridos.
Por eso, pensando en eso la Obra Social de la Universal no podía ignorar tal situación y realizó varios eventos de Acción Socia para los damnificados en las regiones afectadas.
Tres toneladas de víveres, agua y ropa fueron entregadas en Babahoyo, Manta, Portoviejo y Esmeraldas.
Pastores junto a voluntarios de la Obra Social visitaron casa por casa; las que todavía quedaban en pie, carpas en donde se encontraban los damnificados del siniestro y los invitaron a la concentración que se estaba realizando cerca del camión en donde se encontraba la ayuda en la ciudad de Babahoyo.
Lo importante era transmitirles que no estaban solos y que Dios no los había abandonado, por eso el pastor Joao Borges, responsable de la Obra Social dio unas palabras de sosiego a los presentes además de una oración en favor de ellos.
Minutos después se hizo la entrega de la funda de víveres que contenía: arroz, azúcar, aceite, fréjoles, leche, cocoa, café, fideos enlatados, además de agua y algunas prendas de ropa para el uso de ellos.
Cabe destacar que todos los artículos fueron donados y recolectados por los Centro de Acopio que la Universal tiene en todo el país.