El Auditorio de Act City, en el centro de Hamamatsu, en Japón, estaba colmado. Más de mil personas participaron de la conferencia realizada el 29 de diciembre por Renato Cardoso y su esposa Cristiane.
El obispo dio comienzo con una pregunta: ¿Qué haría usted si supiese que va a morir en 60 minutos? Cierre los ojos e imagine que solo le quedan 60 minutos de vida. ¿Qué haría usted?
La pregunta tomó a las personas por sorpresa, hubo un gran silencio en el auditorio. Con los ojos cerrados, todos meditaban acerca de la respuesta durante algunos momentos. En seguida, el obispo les preguntó a los presentes cuáles habían sido los pensamientos que habían llegado a sus mentes. Muchos respondieron que se arreglarían con Dios, o que expresarían sus sentimientos hacia su familia. La mayoría mostró preocupación por la relación con Dios y con sus familiares.
“Es común a todo ser humano, al enfrentarse con la muerte, evaluar qué tipo de vida llevó aquí en la Tierra, recordar sus errores y pedirle perdón a Dios. El primer sentimiento es de arrepentimiento y de preocupación con lo que pasará después de la muerte. El segundo es sobre las personas cercanas. Pero, curiosamente, en la vida cotidiana, Dios y la familia no están en la cima de sus prioridades” señaló el obispo.
“Quien le ha dado prioridad a la vida espiritual y a la familiar, siente paz ante la muerte. Quien no lo ha hecho, siente una gran inseguridad, miedo y sentimiento de culpa. Si Dios y su familia son las dos cosas que más importan a la hora de su muerte, tal vez sea hora de que usted comience a darles prioridad mientras está vivo” agregó.
Amor de Hollywood
Después del llamado de atención, Renato y Cristiane dieron consejos sobre la vida de relación.
“No podemos hablar de familia sin hablar de matrimonio. Y tener un matrimonio feliz ha sido uno de los mayores desafíos de la mayoría de las personas” afirmaron los autores del libro “Matrimonio Blindado”.
Nuestros malos comportamientos en el matrimonio no son casuales, y casi nunca por maldad. Tienen raíces que vienen del pasado. Y tienen que ver con la forma en que cada uno fue criado y las experiencias que se vivieron. Muchos matrimonios intentan resolver los problemas cortando solamente las hojas y los gajos, sin eliminar la raíz. Y eso conduce al divorcio”, advirtió el obispo Renato.
Hablando sin limitación sobre los propios conflictos que vivieron en los primeros años de matrimonio, la pareja destacó que los opuestos realmente se atraen pero, si no existe cuidado, las diferencias pueden ser motivo de peleas en el matrimonio. Por eso, conocer y entender al compañero es más importante que intentar imponer su propia manera de ser.
“Mientras que uno tenga actitudes negativas en la relación, como reclamos, celos y orgullo para reconocer los propios errores, habrá también reacciones negativas de parte del otro. Los problemas deben ser resueltos con inteligencia, usando la razón, no los sentimientos. Ningún matrimonio es como en las películas de Hollywood. El amor no es esa pasión que explota en el pecho, mucho menos atracción física. El amor es la actitud de hacer lo que es correcto el uno hacia el otro” enseñaron.
“No se case para ser feliz, sino para hacer feliz al otro. Invertir en la apariencia física no va a compensar un mal comportamiento. No haga lo que usted siente, sino lo que es correcto que haga” concluyeron.
La pareja acaba de lanzar el libro “120 minutos para Blindar su Matrimonio”