Amar es una elección, una decisión libre de presión externa. No puedo amar a alguien si no tengo elección. Amor es poder elegir a cualquier otra persona, pero decidir solo por una; poder hacer lo que quiera, pero elegir hacer lo que le agrada a quien amo.
Dentro de una relación de amor verdadero, no hay control sobre el otro. Nadie que tenga todos los tornillos en su lugar desea que el compañero haga o deje de hacer algo por miedo. Eso no es amor.
Muchas veces hacemos sacrificios y renunciamos a ciertas cosas por la persona amada. Pero esas elecciones deben ser hechas por voluntad propia y por el placer de hacer al otro feliz, no por miedo de perder o sufrir represalia.
Si usted ha sido un compañero controlador, trabaje en sus inseguridades.
Si usted ha sido controlado dentro de una relación, trabaje en su asertividad.