Hace más de un año, los voluntarios de la Universal que realizan el trabajo evangelístico en los Centros de privación de libertad del Ecuador se han dedicado a llevar la palabra de Dios a los que se encuentra encarcelados, en el Centro Penitenciario zonal 8 Masculino, en Guayaquil.
Desde entonces, aquellos que pensaban haber sido olvidados por la sociedad y hasta mismo por sus familiares encuentran esperanza de escribir una nueva historia.
Además de participar de las oraciones realizadas durante la semana, los internos también aprenden una nueva profesión. El curso de carpintería para detenidos se inició hace más de un mes y cuenta con 70 internos.
De acuerdo con el Pr. Gustavo Vaca, actual responsable por el trabajo de la Universal en los Centros Penitenciarios (UCP), muchos están muy contentos con la novedad.
La idea nació por causa de la necesidad que había. Cuando descubrieron que creamos oficinas, ellos quedaron muy felices y muchos ya produjeron sus propias artes en madera. Lo que más llamó la atención de los internos es que recibieron un diploma y eso los ayudará a poder ingresar en el mercado laboral al momento de recibir la libertad “ dice el Pastor.
La producción de materiales en madera está a todo vapor, tanto es así que se está programando una exposición del material producido para el mes de febrero.
“Uno de los detenidos que conoció el trabajo que realiza la Universal en el interior de los Centros Penitenciarios está ayudando con los talleres. Él está construyendo una réplica del Templo de Salomón en madera, como agradecimiento por el trabajo que desenvolvemos dentro de los Centros Penitenciarios”, comentó el Pastor.