Vacíos, tristes, deprimidos, perdidos… por desgracia, no son pocas las personas que pasan gran parte –cuando no es toda su vida– en ese estado.
Tienen preguntas en su interior, para las cuáles no hallan respuesta. ¿Quién soy yo?, ¿A dónde voy?, ¿Qué hago aquí?, ¿Qué sentido tiene mi vida?… Y para hallar respuestas las buscan en las adicciones, en las fantasías, viajes, en varias relaciones, en el dinero, en lujos, en los amigos… pero, al nal del día, acaban solos y más perdidos todavía que cuando empezaron…
La Fe en la Palabra de Dios es la Única que no deja a nadie sin sentido de existencia… pues, tal como todo lo que existe fue creado por el Poder de la Palabra, así también, solamente la Palabra nos puede sustentar, dar sentido a la existencia, al matrimonio, salud, familia, trabajo… por eso, apreciado lector, ¡no busque más!